A raíz del impacto del huracán Otis a las costas de Guerrero, se generó un debate dentro de la Cámara de Diputados entre la oposición y el oficialismo por la desaparición del Fondo Nacional de Desastres (Fonden); sin embargo, desde la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) se mencionó que dicho fondo “todavía existe”.
Durante la sesión ordinaria de este miércoles, legisladores del PRI, PAN y PRD reclamaron que, de no ser por la extinción de este programa, “la historia de Guerrero sería otra”, mientras que Morena y sus aliados llamaron a no hacer “politiquería barata” y a no sacar “raja política” a raíz de este desastre natural.
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La primera en expresarse sobre este hecho fue Elizabeth Pérez Valdez, del sol azteca, quien recordó que las entidades tenían sus propios recursos por parte del Fonden en casos de acontecimientos como el que sucedió en las costas guerrerenses y que ahora no tienen con qué subsanar los daños.
Andrés Pintos Caballero, de Movimiento Ciudadano, también se sumó a las expresiones por el tema del huracán Otis y la desaparición del Fonden, al hacer un llamado a los legisladores de la fracción oficialista para que se revierta dicha extinción “porque hoy más que nunca se requiere que esta ayuda llegue de manera urgente”.
Por otro lado, Yesenia Galarza, del PAN, criticó que la respuesta del gobierno ante el desastre “ha sido lenta” e instó a que se liberen los recursos necesarios a fin de atender a los damnificados.
Del lado de los diputados oficialistas, Pablo Amílcar, de Morena, propuso a sus compañeros a donar parte de su dieta mensual para apoyar a los afectados por Otis, mientras que Victoriano Wences Real, del PT, llamó a la oposición a no usar el desastre “para hacer política barata y corriente”.
Poco después, Teresa Castell, del PAN, levantó un cartel en el que se pudo leer que “Morena mata sin Fonden”, a lo que Mario Miguel Carrillo, también del partido guinda, exhortó que “les pediría de favor que no caigan en la mezquindad para tratar de sacar raja política”.
No obstante, Margarita Zavala, del blanquiazul, fue un poco más neutral y dijo que “no es hacer politiquería, es ver cómo lo resolvemos y que, si hicimos algo mal, lo reconozcamos, porque terminar con el Fonden no permite reaccionar rápidamente”.
Mientras esto sucedía, Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda, declaró ante senadores que, en realidad, el Fonden no había desaparecido y que, en cambio, se contaba con una bolsa de 18 mil millones de pesos para casos como las afectaciones a causa de la llegada del huracán Otis a Guerrero.
“Actualmente (el Fonden) tiene 18 mil millones de pesos. En México, el diseño institucional del fondo tiene dos componentes: la acumulación de reservas de efectivo, que es lo que usualmente conocemos como el ahorro del Fonden, y el segundo era un sistema de gestión financiera publica para pagar facturas de obras en reconstrucción”, declaró.
En ese sentido, el funcionario explicó que lo que se eliminó de este programa fue la “parte burocrática”; es decir, “ya no se deja que sea Banobras y los municipios quienes establecen el sistema de facturas y sobre los proyectos de recuperación. Lo que se hace es que se centraliza y se trasfieren los recursos a los ejecutores, que pudiera ser la Sedena, a través del Plan DN-III, o cualquier otro, como una entidad”.
Aunado a ello, Gabriel Yorio declaró que, incluso, hay 5 mil millones de pesos en seguros catastróficos, los mismos que se contratan cada año, además de 485 millones de dólares del bono catastrófico por parte de la Alianza del Pacífico, a lo que aseveró que los recursos para atender los desastres “se mantienen intactos” y se renuevan cada ciclo presupuestal.
Redacción web
